Málaga es una de las ciudades más vibrantes y acogedoras del sur de España. La capital de la Costa del Sol recibe cada año a miles de viajeros que llegan en busca de sol, mar, cultura y una espléndida gastronomía mediterránea. Si tu viaje comienza en el aeropuerto de Málaga, la primera decisión clave es cómo desplazarte hasta tu alojamiento para aprovechar al máximo tu estancia. En este punto, optar por un traslado aeropuerto-hotel con un servicio especializado es la manera más cómoda y segura de empezar tu viaje.
Comienza tu viaje con un servicio de transfers en Málaga
Después de un vuelo, lo último que apetece es esperar colas y cargar maletas en un transporte público o preocuparse por buscar la dirección de tu alojamiento. Por eso, los traslados privados en Málaga se han convertido en la elección preferida de muchos viajeros. Hispatransfers ofrece un servicio puerta a puerta, con conductores profesionales que te esperan en el aeropuerto y te llevan directamente a tu hotel. De esta manera, empiezas tus primeras 24 horas en la ciudad sin estrés y con el confort que mereces.
Para ir haciéndote a la ciudad: paseo por el centro histórico
Una vez instalado en tu hotel, el primer contacto con Málaga debe ser su centro histórico. La plaza de la Constitución y la famosa calle Larios son el corazón de la ciudad, donde las tiendas, cafeterías y terrazas invitan a detenerse para pasar un rato relajado tras tu viaje. Desde allí, puedes llegar a la Catedral de Málaga, conocida como “La Manquita” por su torre inacabada, y disfrutar de sus detalles renacentistas.
Muy cerca se encuentra el Teatro Romano, a los pies de la Alcazaba, que es otro de los monumentos más emblemáticos. Subir a la Alcazaba no solo te permitirá descubrir un trascendental período histórico de la ciudad, ya que Málaga fue una ciudad importante del Reino Nazarí, sino también tener una panorámica privilegiada de la ciudad y el puerto.
Parada gastronómica y tarde cultural
Llega el momento de disfrutar de la gastronomía malagueña. Nada mejor que acercarse al Mercado de Atarazanas, donde los puestos de mariscos, aceitunas y productos frescos te dan una idea de la riqueza culinaria local. También puedes probar las famosas sardinas en espeto junto al mar o unas tapas tradicionales en alguna taberna del centro.
Para la tarde, debes saber que Málaga es conocida mundialmente por ser la cuna de Pablo Picasso. Por eso, visitar el Museo Picasso Málaga es una parada imprescindible en tus primeras horas en la ciudad. También puedes explorar el Museo Carmen Thyssen, que reúne una interesante colección de pintura española del siglo XIX y principios del XX.
Atardecer en la playa y paseo por el Muelle Uno
El Mediterráneo siempre está presente en Málaga. Al caer la tarde, acércate a la playa de la Malagueta, situada a pocos minutos a pie del centro, para disfrutar de un baño o simplemente contemplar el atardecer.
Después, dirígete al Muelle Uno, la moderna zona comercial del puerto, donde encontrarás tiendas, restaurantes para cenar y un ambiente animado.
Y, si aún te quedan energías, la vida nocturna de Málaga ofrece muchas opciones: desde terrazas con vistas en hoteles boutique hasta bares con actuaciones en directo o bares de copas en el centro histórico.
¿Y a la vuelta? Vuelve a confiar en un servicio de traslado hotel-aeropuerto
Tras un viaje intenso pero enriquecedor, es hora de volver a contar con un servicio de transfers en Málaga. Por cierto, no solo es útil para llegar al hotel desde el aeropuerto o viceversa, sino también para moverte cómodamente por la ciudad o planear excursiones a lugares cercanos como Marbella, Ronda o Nerja.
Hispatransfers ponen a tu disposición vehículos adaptados a tus necesidades, ya viajes solo, en pareja, con amigos o en familia. Con un traslado aeropuerto-hotel, llegarás directo a tu destino sin complicaciones, ganando tiempo y tranquilidad para disfrutar desde el primer minuto de todo lo que esta ciudad tiene para ofrecer.